El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados
(ACNUR) expresó su preocupación por la propuesta de España de legalizar las
devoluciones automáticas de las personas que tratan de cruzar las vallas en las
fronteras de Ceuta y Melilla.
De salir adelante,
significaría que una persona que intenta acceder a estas ciudades autónomas sin
la documentación necesaria, sería rechazada automáticamente y no tendría
derecho a las garantías legales previstas en la legislación española y de la
Unión Europea, como el derecho a solicitar asilo.
En lo que va de año, más
de 5,000 personas entraron en Ceuta y Melilla de forma irregular, entre ellas
2,000 que huían del conflicto en Siria. En torno a 70% de estos inmigrantes son
mujeres y niños.
En
un comunicado, el ACNUR subrayó
la importancia de que se permita el acceso al territorio a aquellas personas
que necesiten protección internacional e instó al gobierno español a garantizar
que cualquier iniciativa legal para responder a estas llegadas de inmigrantes
cumpla con sus obligaciones internacionales.
Además,
el ACNUR reiteró
su condena del creciente uso de la violencia en la frontera. Este año se han
documentado varios incidentes violentos y se ha registrado un alza en el número
de informes sobre devoluciones automáticas en estas ciudades.
Acnur
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