El Ministro del Interior italiano, Roberto Maroni, ha subrayado este lunes la necesidad de una regulación europea para poder expulsar a los ciudadanos comunitarios que incumplan las condiciones inherentes a la libre circulación entre los Estados miembro.
“Tenemos que poder prever medidas de expulsión y repatriación” para los ciudadanos comunitarios, dijo Maroni, quien anunció que presentará una propuesta en este sentido ante la Comisión Europea, según informaron los medios italianos.
Maroni hizo estas declaraciones durante un seminario sobre inmigración celebrado en París, en medio de la polémica suscitada por la política francesa de repatriación de gitanos, en su mayoría procedentes de Rumanía y Bulgaria, en situación irregular. Maroni constató que la libertad de circulación dentro de la Unión Europea de los ciudadanos comunitarios y el derecho de estos a residir de forma estable en cualquier país de la Unión están regulados, pero no existen “sanciones eficaces”.
El ministro recordó que existe una directiva europea (la 38 de 2004) que establece las condiciones para que un ciudadano comunitario pueda residir en otro país miembro que no sea el suyo. “Se trata de condiciones precisas que a menudo no se respetan”, señaló.
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