Los derechos de
los niños migrantes, independiente de si sus padres intgresaron al país regular
o irregularmente, son la principal preocupación del grupo de expertos de Unicef
que visitó a la Comisión de Gobierno Interior de la Cámara de Diputados. El interés
superior del niño y el derecho a la reunificación familiar no estarían, a su
juicio, del todo asegurados en el actual proyecto de ley de migración y
extranjería, que se encuentra en su primer trámite constitucional.
Los abogados de UNICEF,
Nicolás Espejo y Anuar Quesille, concurrieron ante la Comisión de Gobierno
Interior que estudia el proyecto de ley de migración y extranjería.
Aunque valoraron que se esté repensando la regulación migratoria y que se explicite la integración, la no discriminación y derechos de los migrantes, Nicolás Espejo planteó varios reparos al texto legal presentado por el Ejecutivo, en particular de las normas que podrían conllevar una vulneración de derechos de los niños migrantes.
El abogado calificó al texto legal como “débil” a la hora de promover ciertos principios fundamentales y criticó lo excesivamente programático del proyecto, ya que se establece una serie de derechos pero sin explicitar las garantías de los mismos, ni cómo se pueden hacer exigibles.
Para Nicolás Espejo, una excesiva regulación puede actuar como un desincentivo para la migración regular, por lo que criticó la lógica de promover un cierto tipo de migración, con incentivos para el visado regular, pero que no se tome en cuenta el caso de los migrantes irregulares. En ese caso, cuestionó cómo se garantiza en el proyecto de ley la protección del derecho a la identidad de los hijos de migrantes indocumentados.
El especialista de UNICEF evidenció además la ausencia en el articulado de un principio fundamental para los menores, como es el bien superior del niño, y la ausencia del principio del debido proceso y de la garantía de contar con asistencia letrada, traducción e instancias de reclamación judicial a la decisión administrativa.
Además, llamó a considerar el derecho a la reunificación familiar y a evitar la separación de las familias, reconociéndose ese derecho como de las personas y no de los residentes, sin supeditar su ejercicio a contar con visados regulares.
Aunque valoraron que se esté repensando la regulación migratoria y que se explicite la integración, la no discriminación y derechos de los migrantes, Nicolás Espejo planteó varios reparos al texto legal presentado por el Ejecutivo, en particular de las normas que podrían conllevar una vulneración de derechos de los niños migrantes.
El abogado calificó al texto legal como “débil” a la hora de promover ciertos principios fundamentales y criticó lo excesivamente programático del proyecto, ya que se establece una serie de derechos pero sin explicitar las garantías de los mismos, ni cómo se pueden hacer exigibles.
Para Nicolás Espejo, una excesiva regulación puede actuar como un desincentivo para la migración regular, por lo que criticó la lógica de promover un cierto tipo de migración, con incentivos para el visado regular, pero que no se tome en cuenta el caso de los migrantes irregulares. En ese caso, cuestionó cómo se garantiza en el proyecto de ley la protección del derecho a la identidad de los hijos de migrantes indocumentados.
El especialista de UNICEF evidenció además la ausencia en el articulado de un principio fundamental para los menores, como es el bien superior del niño, y la ausencia del principio del debido proceso y de la garantía de contar con asistencia letrada, traducción e instancias de reclamación judicial a la decisión administrativa.
Además, llamó a considerar el derecho a la reunificación familiar y a evitar la separación de las familias, reconociéndose ese derecho como de las personas y no de los residentes, sin supeditar su ejercicio a contar con visados regulares.
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