El informe de recomendaciones del Consejo de Derechos
Humanos de la ONU ha planteado este viernes a España que respete el principio
de no devolución y garantice a los inmigrantes el acceso a los procedimientos
de asilo. El documento, presentado dos días después de que el Estado se
sometiera a su segundo Examen Periódico Universal en Ginebra, también pide
asegurar el ejercicio efectivo de los derechos humanos a los extranjeros, más
allá de su situación legal. El reporte, que recoge 189 sugerencias de 97 países,
ha sido elaborado por Sierra Leona, Reino Unido y Macedonia. El Gobierno debe
revisar el contenido y contestar hasta julio próximo.
Los derechos de los inmigrantes ocupan buena parte del
informe, que también recoge recomendaciones en otras áreas, como violencia de
género e igualdad, educación, infancia, libertad de expresión y reunión. Más de
una veintena de países han puesto el foco en las devoluciones en caliente y han
pedido a España que adopte "medidas efectivas" para garantizar los
derechos de los extranjeros, entre ellos, el acceso a la sanidad pública —sin
importar su condición— y a los procedimientos de asilo de acuerdo con la
normativa internacional.
Así lo han planteado países como Austria, Canadá, Costa
Rica, Israel, Japón, Noruega, República Checa, Rusia, Suecia, Túnez, Uruguay,
entre otros. Austria, por ejemplo, recomienda "revisar las prácticas
actuales de deportación de inmigrantes en Ceuta y Melilla", así como las
reformas a Ley de Seguridad Nacional para garantizar el derecho a solicitar
asilo.
Canadá se pronuncia en la misma línea y pide a España que
asegure que el marco legal para migrantes, refugiados y solicitantes de asilo,
con "especial atención" a las dos ciudades autónomas, cumpla sus
obligaciones internacionales en materia de derechos humanos.
República Checa plantea a España que "garantice que
la ley de inmigración y sus adiciones previstas, especialmente las relativas a
permitir la devolución sumaria de inmigrantes y refugiados sin el debido
procedimiento, están en consonancia con el principio de no devolución y la
prohibición de tratos inhumanos o degradantes".
Una veintena de países recomiendan trabajar en la lucha
contra el racismo y la xenofobia
España defendió en Ginebra su plan de dar cobertura legal
a este tipo de devoluciones en las enmiendas a la Ley de Seguridad Nacional,
después de que varios países cuestionaran esta práctica. La tesis del Gobierno
es que el "rechazo en frontera" —como le llama a las devoluciones en
caliente— se ejecutan cuando los migrantes no han entrado todavía en España,
aunque, en la práctica, hayan superado parte del vallado que rodea Ceuta y
Melilla.
Una veintena de países recomiendan trabajar en la lucha
contra el racismo y la xenofobia y otros tantos, que considere la ratificación
de la Convención Internacional sobre los Derechos de los Trabajadores
Migratorios y de sus Familiares, un tratado de Naciones Unidas.
El Pais
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